Eva Hvolbaek: «El fútbol es mi evasión»
La danesa, primera extranjera del Oviedo Moderno
El Oviedo Moderno-Universidad ha sido de los primeros equipos femeninos del país en incorporar a una futbolista extranjera. La vía abierta en 2003 por el Rayo Vallecano con la brasileña Milene Domíngues tuvo pronto su continuidad, y así hoy en la Superliga ya actúan jugadoras de varias nacionalidades.
En el caso del conjunto ovetense, su primera extranjera es la danesa Eva Hvolbaek, delantera de 25 años. Toda una beldad, por cierto, pero bastante más que eso. Eva llegó a Asturias con una beca del programa «Erasmus» para completar sus estudios de Medicina en el Hospital de Cabueñes, y es además una estupenda futbolista. En el equipo ovetense confían en ella para que ayude en el objetivo de la permanencia. Cuando le hicimos esta entrevista -en la que evidenció sus progresos con el español- ya había marcado un gol (ante el Sevilla) y había sido objeto de un penalti (contra el Rayo) que encauzó el triunfo carbayón en campo madrileño.
-¿Sorprendida de no ver por aquí toreros?
-No, no, para nada. No vine contando con ese tópico. Mi amiga Olaya Ania, que también disfruta de una beca «Erasmus», y que en su caso está precisamente en Dinamarca, me contó bastantes cosas sobre Asturias. Conozco que ésta no es la tierra de los toreros.
-¿Cómo va su adaptación?
-Bastante bien, porque en realidad no me había creado otras expectativas que las que se originaron con las referencias que me dio Olaya. El paisaje es una maravilla, y la sidra ya la he probado y es una bebida muy agradable. Por otra parte, llevo aquí desde últimos de septiembre y lo que me parece es que no llueve tanto como me habían dicho.
-¿Cuándo se inició en el fútbol?
-Muy pronto. A los 10 años ya comencé en un equipo de Copenhague. Es cosa normal que las niñas danesas se inicien tan pronto. En mi país hay bastante afición, aunque prevalece el fútbol de hombres. Michael Laudrup es muy querido allí. Fue uno de los grandes, que como sabrán jugó en el Barcelona y el Real Madrid. Ahora entrena al Brondby.
-¿Le resulta difícil compaginar los estudios de Medicina con el deporte?
-No, yo diría que hasta me resulta fácil. Aunque en Cabueñes no tengo que estudiar mucho, pues más propiamente lo que hago es trabajar. Pero sí que para mí ha sido siempre importante alternar los estudios con la práctica deportiva. El fútbol me viene bien para evadirme. Me despeja la mente.
-¿Ser la primera extranjera en el historial del Universidad la responsabiliza?
-Me han hablado de esa circunstancia, pero no modifica mi planteamiento inicial. He tenido la suerte de entrar en un equipo donde hay unas buenas personas y trato de esforzarme al máximo. Entreno con ganas y en los partidos quiero aportar cuanto pueda.
-Nos la han presentado como delantera, aunque por su aventajada estatura no parece que lo hiciese mal de defensa.
-Bueno, ya digo que estoy aquí para ayudar. El puesto depende de lo que decida el míster Villar. En Dinamarca ya he jugado de mediocampista y de lateral. Aquí actúo como delantera porque quieren que marque goles.
-¿Y usted qué dice?
-Lo haré lo mejor que pueda donde se me necesite. Ya metí un gol contra el Sevilla, y me hicieron penalti en Madrid.
-¿Entonces va bien su adaptación al equipo?
-Sí, yo creo que voy progresando. Fue más difícil al principio, por el desconocimiento del idioma y de las compañeras. Aunque todavía tienen que conocerme mejor, así como yo a ellas.
- Con el trabajo, los entrenamientos, los viajes a los partidos y las clases de español, ¿le queda algo de tiempo libre?
-Ya lo creo, siempre se encuentran algunos momentos libres. Ya hice unas escapadas a La Coruña, Santiago de Compostela, Salamanca y Covadonga.
-¿Qué impresión le causó Covadonga?
-Me gustó mucho, de verdad. Aunque sucedió que era un día de mucho frío, con lluvia e incluso algo de nieve. Tengo que volver otro día que haga sol.