Las jugadoras del Gijón FF rememoran las horas posteriores al ascenso a Superliga

A la tercera fue la vencida. El Gijón Fútbol Femenino cumpliendo lo que reza el dicho, necesitó de tres participaciones en la fase de ascenso a Superliga para dar el salto a la máxima categoría, donde jugará la próxima temporada. En los dos años anteriores, Rayo Vallecano y Oiartzun dejaron al equipo asturiano con la miel en los labios. Esta temporada, pese a imponerse nuevamente en el grupo II de Nacional, tampoco contaba el Gijón en los pronósticos para el ascenso, pero las jugadoras de Ramón Trapero han roto todas las quinielas y se han impuesto en su grupo de forma inmaculada con dos victorias frente a La Antigua (un recién descendido) y L'Estartit (uno de los máximos favoritos al ascenso).

Precisamente este último equipo era el obstáculo a salvar para lograr el ascenso en la última jornada. A las gijonesas les bastaba el empate, pero tenían el inconveniente de jugar el partido en Girona, con el público en contra y ante un equipo que había concluido invicto el campeonato y que sólo había cedido un empate en su terreno de juego. Las jugadoras del Gijón superaron todas esas adversidades y terminaron a lo campeonas, ganando por 1-2. "Fue un momento de agobio y de mucha emoción", relata la delantera Lia. "La verdad es que ya llevábamos mucho tiempo trabajando para ello y este año el equipo estuvo muy centrado en todo", apostillaba su compañera Tifi. "Tenía ganas de estar con las compañeras", añade Lia nuevamente recordando el momento del pitido final el pasado domingo. Entre tanta alegría, las gijonesas sólo lamentaban una cosa: "Nos dio pena por no poder celebrarlo con nuestra afición, que se quedó en Asturias".

Una afición que, pese a quedarse en casa, no dudó en ir a recibir a la expedición rojiblanca a su llegada al aeropuerto. "Nos dio mucha emoción al ver tanta gente esperándonos puesto que al ser tan tarde no pensábamos que estarían allí en el aeropuerto. Ha sido lo mejor de mi vida y aún hoy me emociono al pensar en ello", confiesa la delantera asturiana.

Cuando se lanza la pregunta de si el no ir de favoritas ha podido beneficiar a su equipo, la capitana Montse es la primera en responder: "Puede que los otros equipos se confiaran y nos menospreciaran, pero nosotras confiábamos en nuestras posibilidades", dice. A esto, añade Lia que "nunca somos favoritas, pero al final siempre damos la sorpresa. Todos los años nos pasa lo mismo, pero por fin este hemos dado la campanada y hemos cerrado a mucha gente la boca". "La verdad es que el que casi nadie contara con nosotras para el ascenso nos motivó aún más", remata la pregunta Montse.

Confían en que lleguen las ayudas para jugar sin problemas en Superliga

Y aunque el ascenso a Superliga está conseguido, ahora llega lo más difícil, reunir el dinero necesario para poder competir con garantías. En el club asturiano nadie duda de que no vayan a recibir las ayudas económicas necesarias para competir , pues los gastos en esta competición se disparan. A este respecto,tanto la centrocampista Montse como la defensa Tifi se muestran optimistas cuando se le pregunta por ello y coinciden en decir que "esperamos que las ayudas lleguen, porque a la Superliga se le da más publicidad y, claro, es un mayor nivel y llama más la atención a las empresas".

El guante está lanzado. Ahora le toca a las instituciones y empresas de Gijón recoger el mismo.