El ojeador: Lea Schüller

El ojeador: Lea Schüller

FICHA TÉCNICA

Nombre completo: Lea Schüller

Nombre futbolístico: SCHÜLLER

Fecha de nacimiento: 12.11.1997 (19 años)

Nacionalidad: Alemana

Altura: 1'73mClub: SGS Essen (Contrato hasta verano de 2019)

Campeonato: Allianz Frauen- Bundesliga (Alemania)

En pleno proceso de renovación del fútbol femenino alemán Steffi Jones sigue buscando jugadoras adecuadas para su nuevo proyecto, estilo y filosofía. Una de las mayores cuestiones que tiene que resolver la preparadora de Frankfurt es quiénes serán las herederas de leyendas como Célia Sasic o Anja Mittag; delanteras que han sido capitales en los éxitos de Alemania en los últimos años. Muchas opciones y perfiles diferentes. Pero ninguna brilló en la pasada Eurocopa de los Países Bajos. Alexandra Popp, que no estuvo en la tierra de los tulipanes este verano, será la que coja la responsabilidad, y lo más normal sería que Pauline Bremer, más tarde o más temprano, vuelva a la selección para jugar arriba y no en banda. Pero, ¿qué otra delantera podría ser la nueva goleadora o referente en la mannschaft?

Los perfiles que maneja Jones son muy diferentes: Alex Popp (una atacante o «todocampista» inclasificable), Svenja Huth (rápida y encaradora), Mandy Islacker (rematadora de mil recursos), Hasret Kayikci (falsa 9 para combinar), Lena Petermann (juego de espaldas) y Pauline Bremer (el típico «tractor» alemán). Pero en los últimos meses ha aparecido una nueva opción que quiere «comerse» el mundo.

Hablamos de Lea Schüller.

Debutó con tan sólo 16 años recién cumplidos en la Bundesliga. Markus Högner, segundo entrenador de la selección alemana en estos momentos, no dudó en absoluto en darle minutos a otra joven talento que estaba en las categorías inferiores del club. La gran diferencia con el resto ha sido que no sólo debutó y ha tenido minutos en la liga, sino que se convirtió en poco tiempo en jugadora fija en el once titular y desde entonces ha pasado de ser otra apuesta más a convertirse en uno de los pilares del SGS que en estos momentos entrena Daniel Krauss.

Desconocida para muchos, pero uno de los alicientes más interesantes de observar para el aficionado fiel a la Bundesliga estos últimos años. A partir de ahora, sobre todo si debuta esta semana con la absoluta, tendrá el «cartel» que se merece desde hace mucho tiempo, pese a que no ha brillado en exceso en torneos con las inferiores de Alemania. De hecho, la sensación que tengo yo y que comparten los expertos en el fútbol femenino alemán es que no convencía ni a Anouschka Bernhard ni a Maren Meinert.

Y es que es muy curioso el caso de Schüller. Pese a que la generación a la que ella pertenece, desde la del 96′ a la del 98′, es la más limitada en cuanto talento de los últimos años, nunca terminó de convencer a las seleccionadoras en sub17 o sub19/20. Si bien es cierto que fue al mundial sub17 del 2014, no formó parte de aquella selección que se clasificó siendo campeona de Europa. Y en el pasado mundial sub20 de Papúa Nueva Guinea, no estaba en la lista definitiva de Meinert. La lesión de Nina Ehegötz fue la que propició su convocatoria. Independientemente de porqué no fuera convocada, en ambos mundiales no pudo brillar. En el primero por estar en una generación muy gris y en el segundo por lesión en el primer partido del torneo.

Los números de la jugadora de Tönisvorst son excelentes pese a su juventud y algunos problemas físicos que ha tenido en estas temporadas. Nada más y nada menos que 25 goles en 61 partidos en Bundesliga con tan sólo 19 años. De hecho, salvo en su primera temporada completa que fue la decimosegunda máxima goleadora de la competición, las dos siguientes estuvo en el top 9 anotando 8 goles en ambas temporadas (mejores números que Ada Hegerberg cuando estuvo en Alemania y tenía su edad). Sin ser una «killer» tiene unos número extraordinarios. Y sin estar en un equipo que luche por el título en la siempre complicada y competida AFBL.

La apuesta de Jones y Högner es más que legítima. Quizás esté un poco verde para marcar diferencias al máximo nivel, pero el potencial es más que evidente. No obstante, la joven y tímida Schüller estuvo en la preselección para la Eurocopa. En breves la apuntarán los grandes focos, y si sigue progresando igual, no tardaremos mucho en verla convertirse en una referencia de este deporte.

Ámbito físico

Sin llegar a ser tan fuerte o tan alta como las delanteras referencias que vemos en el fútbol femenino actual, ni tampoco tan rápida como las jugadoras de banda o 3/4 que brillan hoy en día; Schüller destaca por su poderío físico y despliegue de sus facultades. Es lo suficientemente fuerte, sobre todo en el tren superior, como para pelear la posición con las centrales del máximo nivel, y es lo suficientemente veloz con espacios para que te sea útil en la transición o jugando por banda. Desde que debutó siempre ha dado la sensación de ser un poco «desgarbada», pero con el paso del tiempo ha ganado mucho músculo y ha empezado a saber utilizar sus armas. Su capacidad de salto es más que destacable; que unida a su fuerza del tren superior y su capacidad de llegada, hacen que sea difícil de parar en centros laterales a los que va a rematar de cabeza.

Ámbito táctico

Empezó como pareja de baile de Charline Hartmann jugando un poquito por detrás de ella como segunda delantera, aunque en muchas ocasiones la desplazaron tanto a la banda derecha como a la banda izquierda; para terminar jugando este inicio de temporada como delantera centro del Essen. Quizás su mejor posición es jugar detrás de una referencia para que pueda explotar su mejor cualidad: la llegada.

Tiene tendencia a caer a banda para buscar hacer la diagonal o intentar desmarques de ruptura, llegar al segundo palo para rematar y también retrasa su posición en muchas ocasiones tanto para aprovecharse de los rechaces y disparar como para generar que la central salga y que sus compañeras aprovechen los espacios. Es aplicada en defensa y ayuda en la presión. Bastante inteligente en la toma de decisiones.

Ámbito técnico

No es un portento en lo técnico. Si que es verdad que con el tiempo ha mejorado muchísimo sus controles, sus pases y su habilidad técnica en general; pero no deja de ser una jugadora «aseada». Me recuerda a una especie de Popp y Lotzen, con menos físico pero con mucho más refinamiento técnico. Y como muchas jugadoras en el fútbol femenino, maneja de forma decente la pierna débil.

Su mejor virtud es el disparo desde lejos, normalmente colocado y bastante fuerte. Esos controles orientados casi perfectos para tener opción de disparo son casi tan buenas como sus llegadas desde segunda línea. No es una jugadora para combinar, pero con espacio sí que está capacitada para llevar bien en un contra y dar el pase adecuado en el momento idóneo. Cuando jugaba en banda mejoró mucho su capacidad para poner el pase atrás para la llegada de sus compañeras. No obstante, a ella le encanta que le sirvan esos balones.