La Copa, reina y señora de final de temporada
El diseño y elaboración del trofeo es obra de la Joyería Alegre de Madrid, responsable también de la Copa del Rey masculina
Todas las jugadoras sueñan con aupar mañana la Copa de la Reina. Un trofeo casi nuevo, que estrenó el Barcelona. El trofeo, más decoroso que el anterior, mide 73 centímetros de altura y tiene diez kilos de peso. El diseño y elaboración del trofeo es obra de la Joyería Alegre de Madrid, responsable también de la Copa del Rey masculina. Un trofeo sin duda con mayor presencia que el anterior cuyo valor económico, dado que el sentimental y deportivo es incalculable, está alrededor de los 10.000 euros.
REINAS DE COPAS
Han sido un total de 12 los equipos que han levantado la Copa pero sólo dos la tienen en propiedad. Para tenerla en propiedad han de ganarla tres veces seguidas o cinco alternativas. Son Levante y Espanyol los que cumplen el requisito para tenerla en sus vitrinas para siempre.
La Copa se la queda el último ganador durante un año, paso tras el cual deja paso a una réplica que da la Federación al club para que se entregue al futuro campeón de esa temporada. Además de la copa, la RFEF entrega 25 replicas del Trofeo a las jugadoras que componen la plantilla del club campeón, y 25 medallas plateadas para las del segundo clasificado junto a una placa. Además, el comité decidirá la MVP de la final. El año pasado recayó en Sonia Bermúdez.
Para Manuel Almécija, delegado del Levante y veterano del club, la Copa que tienen en propiedad es «la más bonita porque tiene todas las chapas, incluída las del Karbo y primeros campeones» aseguró a esta misma página.
LA «CHAPITA» DE LA DISCORDIA
Por todos es sabido y visto que en el momento en que los chicos ganan el trofeo de la Copa del Rey, se graba al momento mientras los jugadores celebran el título antes de ascender al palco de autoridades a por él. Esto no pasa en el fútbol femenino, puesto que la RFEF no se encarga de ello, aunque si de dar la chapa grabada para adjuntarla al trofeo durante esa misma semana.
La mala suerte quiso que el FC Barcelona ganara el primero aquella Copa, nueva y que el siguiente fuera el Espanyol... que tuvo que celebrar el título con la chapa, única, de su más directo rival. Dio la vuelta al mundo la imagen de las jugadoras del Espanyol celebrando el título con un esparadrapo con el nombre de su club. Como era la única chapa, se creó una gran confusión. Fueron reaccionarias las redes sociales, que rápidamente acusaron de «fallo garrafal» al pensar que la RFEF tenía previsto entregarle esa copa al Barça. Fallo técnico. La de este año, celebre quien la celebre, tendrá los nombres de Barça y Espanyol en ella.
Curiosa es la historia de la Copa en las vitrinas del Levante, no tiene todas las chapas. Cuentan, desde el Levante, que tras exponer el trofeo definitivamente en sus vitrinas la Federación les entregó la placa y en un...»entre unos y otros» la placa está en un cajón y la Copa en una vitrina, además, le falta su propia chapa de campeón.
El Levante fue el primer equipo en tener la Copa en propiedad, tras ganar en 2.000, 2.001 y 2.002. Y el Espanyol hizo su quinta alternativa en 2010, año que se quedó el trofeo y comenzó el nuevo.