Ludmila no termina de encender su chispa
La delantera del Atlético de Madrid atraviesa su peor racha goleadora desde que llegó
El Atlético de Madrid está firmando una temporada acorde a lo que se esperaba de ellas tras las irregularidades experimentadas el curso anterior a pesar de haber ganado la Supercopa de España. Las colchoneras están sitúadas en puestos Champions, con dos partidos menos, y en la Supercopa, a pesar de recibir un severo correctivo a manos del Barcelona (7-0), se clasificaron para la final.
Sin embargo, hay una futbolista que no termina de encontrar sus mejores sensaciones en el presente curso, que años atrás su aporte ofensivo había sido determinante, y en esta campaña, su rendimiento está lejos de su nivel habitual. Se trata de Ludmila da Silva.
La delantera brasileña de 27 años atraviesa un momento de forma al que no nos tiene acostumbrados. Su participación en el equipo hasta la fecha entra dentro de lo habitual, sumando un total de 728 minutos en liga repartidos en 13 encuentros y siendo titular en 8 de ellos, lo que no es tan común es que hasta la fecha solo lleve 4 goles y uno de sus puntos fuertes, la potencia física, haya menguado.
Hasta la fecha, está registrando su peor bagaje goleador desde que llegó al Atlético de Madrid. Por estas fechas del campeonato, Ludmila desde que fichó en 2017, siempre había superado la cifra que lleva hasta el momento en el mes de enero de competición. Sin ir más lejos, en la temporada de su debut, a finales de enero de 2018, ya había visto portería en siete ocasiones. Su curso más goleador fue el pasado, donde hizo 15 dianas en liga y, en estos mismos días, a finales de enero de 2021, marcó 11 goles en liga y terminó el campeonato nacional con 15.
A pesar de que los números digan lo contrario, el punto fuerte de Ludmila da Silva no ha sido tradicionalmente el gol, es la potencia y velocidad. La internacional con Brasil, se ha servido siempre de esas características diferenciales para generar un número elevado de ocasiones de peligro de las que se ha beneficiado mucho su club, el Atlético de Madrid.
En la actual temporada parece haber perdido ese 'poder' que la hacía ir un punto por encima del resto. Desde fuera se ve a una Ludmila que ha perdido esa chispa de velocidad y ha entregado las 'llaves' del ataque rojiblanco a Deyna Castellanos que se está erigiendo como la jugadora más determinante en la faceta ofensiva del cuadro colchonero con sus 9 goles y 2 asistencias en liga.