Jana Fernández se doctora en la Supercopa
La joven defensora blaugrana ha dejado de ser una promesa para convertirse en una realidad
No ha podido comenzar mejor el año 2022 para el FC Barcelona. Con pleno de victorias en liga -a falta de que se dispute el encuentro aplazado frente a la Real Sociedad- y alzándose con la Supercopa de España, el único título que les faltó la temporada pasada para firmar un año colosal. En todos los encuentros jugados en este nuevo año vuelven a destacar por su capacidad goleadora con 20 goles en 4 partidos, una media de 5 tantos por encuentros, y también, por su solidez defensiva. En lo que llevamos de 2022 aún no saben lo que es encajar goles. De hecho, el último equipo que les perforó la portería fue el Real Madrid en liga el 12 de diciembre y Asllani fue la encargada.
A pesar de la ausencia de un pilar fundamental en la zaga como Mapi León en los últimos compromisos, el cuadro culé no ha notado en demasía su ausencia. En parte, por el gran nivel mostrado por Jana Fernández, su sustituta en este periodo pero con clara intención de hacerse un hueco en el once.
Esta temporada está siendo la de la consagración de la futbolista natural de Sant Esteve de Sesrovires. Debutó el 9 de diciembre de 2018 frente al Madrid CFF con 16 años, y en el curso pasado, comenzó a tener dinámica del primer equipo entrando en las rotaciones de Lluís Cortés sumando un total de 766 minutos en liga, 101 en Champions y 11 en Copa. En consecuencia, en la presente ha dejado de ser una promesa para convertirse en un realidad. Su polivalencia -ha jugado en todas las posiciones de la defensa-, características y subida progresiva de nivel, la han hecho ser algo más que una jugadora de rotación con Jonatan Giráldez. Y la Supercopa de España ha sido una buena muestra de la confianza que deposita el cuerpo técnico en ella, siendo de la partida en los dos encuentros por delante de Andrea Pereira, futbolista fundamental en años anteriores en la zaga.
Ante el Real Madrid, en aquella apretada eliminatoria que no se resolvió hasta el tiempo añadido, jugó el encuentro completo reflejando que pese a su juventud, no le pesó la responsabilidad que tenía de detener el ataque madridista formado por Esther González y Athenea del Castillo. Reflejó en el campo temple, contundencia, velocidad y un buen entendimiento con Irene Paredes. Del mismo modo, contra el Atlético de Madrid en la final donde fue sustituida por Pereira en el 65'. En los dos choques, al igual que en los anteriores encuentros donde ha sido de la partida, ha sacado a la luz una de sus características más depuradas que es la de sacar el balón jugado. Un sello made in La Masía.
En lo que llevamos de temporada, ha participado en 12 encuentros ligueros, siendo titular en 6 de ellos donde ha acumulado 582 minutos y ha visto portería en dos ocasiones (Rayo y Alavés). En Champions, ha jugado cuatro partidos, tres de ellos saliendo desde el inicio sumando en total 252 minutos y en la Supercopa, como se ha mencionado anteriormente, ha sido titular en los 2 compromisos. A nivel global, ya ha jugado más en lo que llevamos de campaña que en todo el curso anterior.
Con contrato hasta 2023, es una de las jugadoras llamadas a ser importante, no solo en Can Barça sino también en la selección. La lesión de Mapi le abrió las puertas de la titularidad y no desentonó, convirtiendose así en una futbolista a tener en cuenta en el fútbol español.