Tres certezas y tres dudas antes del comienzo
Ha sido un verano largo, que unido a los meses de confinamiento en los que la liga -y el mundo- se detuvo, han hecho la espera casi insoportable, vuelve la Primera Iberdrola, un torneo con más alicientes que nunca.
FC Barcelona: máximo favorito.
A pesar de que las azulgrana no han añadido ninguna futbolista de renombre internacional a su equipo, la solidez demostrada durante la temporada pasada, el buen hacer en la Champions League, donde se quedaron a un paso y merecieron llegar a la final, y la profundidad de una plantilla con dos jugadoras de mucho nivel para prácticamente cada puesto, sitúan al Barcelona un peldaño por encima del resto y como máximo favorito para revalidar el título de la Primera Iberdrola en una temporada que esperemos este año sí pueda completarse.
¿Quién persigue?
Para intentar evitar el alirón culé nos encontramos a una amplia nómina de equipos, entre la que destaca el Atlético de Madrid. Las colchoneras, al contrario que en temporadas anteriores, se han reforzado muy bien, identificando los déficits del equipo y fortaleciendo la plantilla con jugadoras de experiencia contrastada. El conjunto rojiblanco parece el principal candidato al segundo puesto, pero no puede dormirse en los laureles, porque otros dos conjuntos también han mejorado notablemente y acechan las plazas que dan acceso a la Champions League 21/22, temporada en la que el tercer clasificado también disputará competición europea.
Se tratan de Levante y Real Madrid. Las granotas, que llevan varios años en las posiciones de cabeza, con dos terceros puestos consecutivos, han dado un salto de calidad este año con incorporaciones como Viola Caligaris, Irene Guerrero o Carol Férez, que se unen a una escuadra sólida a la que sólo le ha faltado tener más regularidad para aspirar a cotas mayores.
Por otro lado, el Real Madrid es una de las grandes incógnitas y alicientes. Sus fichajes, en su mayoría jóvenes con talento ya contrastado, llegan con el hambre necesaria para demostrar que merecen llevar la camiseta blanca. Sin embargo, no podemos olvidar que son muchas piezas nuevas y alcanzar velocidad de crucero siempre se antoja difícil de buenas a primeras.
Equipos revelación
El Betis, con las llegadas de Mari Paz y Oriana Altuve, entre otras, y la Real Sociedad de Natalia Arroyo, que también ha logrado incorporaciones de mucho nivel, además de la continuidad de Nahikari-, son los principales candidatos en las quinielas a convertirse en equipos revelación de la temporada, que se presenta muy abierta.
No podemos olvidarnos de otros grandes equipos del fútbol femenino español. El Athletic siempre da pelea y Valencia o Espanyol, tras la calamitosa temporada salvada gracias a la anulación de los descensos, han dado un giro de timón y también son candidatos a estar en la parte alta de la tabla.
¿Y los candidatos al descenso?
La igualdad es máxima y eso va a hacer la zona de descenso más peligrosa que nunca, con el agravante de que esta temporada serán cuatro las plazas que supongan el adiós a la Primera Iberdrola para sus ocupantes. Eibar y Santa Teresa como recién ascendidos, Rayo Vallecano, inmerso en su enésima crisis institucional, y Sporting de Huelva, que siempre se mueve en la zona roja para acabar salvándose, parecen los principales candidatos, pero cualquiera que titubee caerá al abismo porque nadie va a estar dispuesto a ceder.
Liga más interesante
Con todos estos alicientes, la Primera Iberdrola 20/21 se presenta más atractiva que nunca. En lo que se refiere a nivel de los equipos, competitividad e interés generado, probablemente estemos hablando de la mejor liga española de la historia. Las jugadoras y los equipos están cumpliendo su parte del acuerdo, pero hay cosas que todavía fallan.
¿Dónde se podrá ver?
De nuevo, las típicas guerras empresariales van a propiciar que la cobertura televisiva del campeonato sea escasa, con sólo dos partidos en abierto... si es que eso llega a ocurrir.
Durante la primera jornada, tan solo se podrá ver por televisión el Barcelona-Real Madrid.
Una auténtica desgracia que sigue frenando el crecimiento de una liga que, por otro lado, cada año es más interesante.