Quiero ser como Torres
Ni bailarinas, ni princesas; muchas niñas sueñan ahora con ser futbolistas
El fútbol femenino español está aún a años luz del masculino, pero parece que las niñas se han propuesto acortar distancias a fuerza de tesón, pasión y profesionalidad.
Un claro ejemplo son las benjaminas (8 y 9 años) y alevines (10 y 11) del Atlético Féminas, pertenecientes al Atlético de Madrid, uno de los pocos grandes clubes españoles que tienen cantera para niñas. «No faltan aunque tengan fiebre o nieve», asegura Laura Martínez, entrenadora de las alevines.
Juegan contra niños, porque no hay más equipos femeninos en su categoría. Para Laura, la gran diferencia entre sexos es «la técnica. Ellos usan más su cuerpo y su fuerza. Ellas son más inteligentes, piensan más las jugadas».
Apoyo de los grandes
Recordando la película Quiero ser como Beckham –en la que una chica hindú debe afrontar trabas religiosas y sociales para realizar su sueño–, Laura asegura que ellas no tienen casos así, porque la sociedad es más abierta que antes, pero que les «han llegado niñas que se han ofrecido para entrenarse teniendo que hacer cada día 200 km o que se venían a vivir desde Galicia si las cogíamos».
Las trabas las pone el sistema. Sheyla Moreno, entrenadora de las benjaminas, asegura que la afición está creciendo mucho, pero que «lo que hace falta es que los clubes grandes lo apoyen, porque sin apoyo económico, publicidad... no se podrá llegar al nivel de los EE UU, donde hay Liga profesional».
Erika Sánchez (11 años), la precoz :
Esta interior izquierda alevín empezó a jugar en casa, con sus padres, a los 5 años. Su ídolo es Fernando Torres, aunque asegura que no se pone como meta parecerse a nadie jugando, y es una incondicional del Atlético. También afirma que le gustaría que hubiera equipos mixtos.
Blanca Rubio (9), la del clarinete:
Lo que más le gusta del fútbol a esta extremo derecho benjamín es marcar goles, pero también juega al tenis, toca el clarinete y estudia francés. Quiere jugar como Gronjkaer, aunque su ídolo es Torres. Sueña con formar parte del primer equipo del Atleti y le gustarían que el fútbol fuera mixto.
Noelia Gil Pérez (10 años), la madridista:
Su equipo es el Real Madrid ––que no tiene equipo femenino–– y su ídolo Iker Casillas «porque es buen portero y guapo», pero esta portera alevín lleva 3 años defendiendo los colores del Atlético de Madrid.
Rocío Gómez, la abogada (8):
Empezó como centrocampista en un equipo masculino del barrio madrileño de Aravaca, pero el Atlético ha descubierto en ella a una gran meta que asegura disfrutar «parando balones». Atlética hasta la médula, quiere jugar «como Leo Franco, que es el mejor». De mayor quiere ser futbolista y abogada.