Cris Prieto, portera revelación: «Me lo pensé muy mucho antes de venir»

Portera del Espanyol, ha sido uno de los pilares de la gran temporada periquita

Comenzó cuando tenía 14 años y con sólo 21 se ha plantado en Superliga, ha formado parte del equipo revelación de la temporada y ha debutado extraoficialmente con la selección española. Con su juventud y sus ganas esta joven de Igualada (Barcelona) tiene claras sus metas y derrocha ilusión.

LaLu - Eres joven y juegas en el equipo revelación de la liga, habéis sorprendido a propios y extraños, ¿cuál crees que ha sido la fórmula?

Cristina - Esta temporada para mí ha sido genial, porque la verdad es que no estaba demasiado segura de dejar mi equipo de toda la vida y, sin embargo, ahora no me arrepiento para nada. Pero no por haber quedado terceras, eso es lo de menos, lo importante es la gente que compone este equipo. Creo que es eso lo que nos ha llevado a tener buenos resultados. También es verdad que los entrenadores tienen mucha culpa porque cada partido se preparaba según el rival; yo nunca había hablado del equipo contrario, claro que son otras categorías, pero... es eso, a parte del buen trabajo, la entrega y la ilusión que hemos puesto. Lo que pienso que ha sido la clave es el ser un equipo "unido", el "buen rollo" que yo he visto en el vestuario.

- Vuestra eliminación de la Copa ha sorprendido a muchos que tenían puestos en vosotras los ojos por la buena temporada. ¿Qué os falló en la eliminatoria contra el Rayo?

Nos falló el partido en casa, el que perdimos 1-5... ¿qué quieres que te diga? Yo había soñado con la Copa, fue un golpe duro que te metan 5 goles en el primer partido, ¡te puedes imaginar! Supongo que la gente pensará que saltamos al campo confiadas y que nos dieron "pal pelo", pero yo creo que no. Yo estaba convencida que sacaríamos el partido, pero no salí pensando que era puro trámite. Creo que tuvimos lo que se dice "un mal día" y ellas hicieron el partido de su vida, pero el fútbol es así y lo tenemos que aceptar. A la semana siguiente fuimos a Madrid y yo estaba segura que pasaríamos, que meteríamos como poco 7 (ríe) pero bueno, soñar es gratis de momento... Y nada, ahora a "soñar" con la Copa de Catalunya, ¡esta sí!

- Eres de Igualada, que para el que no lo conozca, está lejos de Barcelona capital. ¿Cómo llegaste al Espanyol?

La temporada pasada ficharon por el Espanyol Marta Cubí y Berta Carles del Igualada. Y no sé, tengo entendido que Marta habló bien de mí aquí y en verano me llamó la que entonces era entrenadora del femenino A, Titi, y me propuso venirme para poder jugar en Superliga. La verdad es que me lo pensé muy mucho antes de venir porque a mí lo que me gusta del fútbol es ese rato con mis amigas/compañeras, a parte de la competición, de ver cómo me supero. Sabía que si estaba mal en el equipo no podría seguir jugando, por eso tenía claro que si era así, me volvía rapidito para Igualada, pero, ¡qué va!, aquí he estado y estoy muy bien desde el primer día y eso se lo tengo que agradecer a todas las personas que tan bien me han tratado. ¡GRACIAS!

- ¿Cómo ha sido tu trayectoria deportiva?

¿Mi trayectoria deportiva? (ríe) Me hace gracia esta pregunta, tengo trayectoria deportiva... ¡mola! Pues empecé en 2ª Catalana con el Igualada, estuvimos en esa categoría, no sé si dos o tres temporadas, no lo tengo muy claro... en esa época jugábamos en un campo de tierra ¡qué tiempos! Además todas éramos muy jovencitas, más bien niñas. Y nada, fuimos creciendo con el equipo y subimos a 1ª Catalana y al año siguiente ya estábamos en Nacional. Esa temporada fue alucinante. La primera temporada en Nacional creo que quedamos en quinto lugar y a la siguiente sufrimos para mantenernos, pero lo conseguimos. Y ya llegamos a esta temporada en la que he tenido la gran suerte de jugar en el Espanyol. A lo largo de estos años he tenido 4 entrenadores, unas cuantas compañeras, muchas rivales, y amigas, sobretodo amigas.

- Este año ha sido tu debut en Superliga. ¿Cómo te has visto en la portería?

Sinceramente, al principio no estaba muy segura en la portería, no me sentía bien bajo palos. Pero poco a poco me fui haciendo y fui sintiéndome más a gusto, más segura. La verdad es que si miras números, me han marcado muchos goles, pero pienso que no he hecho un mal papel. He hecho todo lo que he podido (sonríe).

- Y... ¿ves mucha diferencia entre las categorías en las que has jugado y la categoría máxima?

La diferencia que veo es que en Superliga tienes que estar concentrada hasta que el árbitro pita el final, cada segundo de partido. En Superliga hay jugadoras que te desmontan todo el trabajo en medio minuto si te despistas. Y en la portería tienes que estar mucho más atenta porque en cualquier momento pueden sacarse un chute o un jugadón.

- Debut también extraoficial con la selección española. Nacho Quereda te eligió para jugar contra el Washington Freedom. ¿Cómo te quedaste cuando viste que eras una de las elegidas para el partido?

No me lo creía, pensé "¿Cómo han podido falsificar esto?" cuando Salvador (el delegado) me dio el papel de la convocatoria. Pero le vi la cara y ya supe que no era coña. No sé cómo explicar la sensación ¡es flipante! Además la gente me felicitaba y me abrazaban y no sé, ver que la gente se alegraba tanto por mí, es una pasada, se me ponía la carne de gallina, tardé en asumirlo (ríe). Es que es algo tan alucinante que ni me había atrevido a soñarlo. El hecho de ir con gente de mi equipo como Marta Cubí o Raquel Cabezón y que también fueran con las pequeñas Miriam y Sarita, me hacía tener todavía más ganas y menos "miedo".

- ¿Cómo viviste ese debut que, aunque oficioso, no deja de ser un debut?

Estaba muy nerviosa. En el banquillo miraba a mi alrededor y pensaba que todo aquello no podía ser cierto, vestida con la camiseta de la selección. Y cuando me mandó que calentara, ufff, y luego al saltar al campo... No sé, a lo mejor hay gente que piensa que no es para tanto, pero para mí eso era una recompensa para todo aquel que había confiado tanto en mí y por quienes realmente estaba allí y por eso me parecía tan importante. Sólo espero que el entrenador quedara contento. Jugar en la Selección es lo más, sigue siendo el sueño que nunca soñé hecho realidad.

- La portería es un puesto difícil pero has conseguido hacer una temporada redonda llegando a ser un pilar importante en los planes de Santi Fernández. ¿Te esperabas cuando llegaste todo esto?

Qué va, además a mí me llamó Titi y cuando supe que era otro el entrenador incluso me pregunté si me querría o no en su equipo. Luego la cosa ha ido como ha ido, desde el primer día sentí que Santi confiaba en mí y supongo que me gané el puesto, aunque luego me quedé sola en la portería (sin recambio en el banquillo) y no había más remedio (ríe). A ver si la temporada que viene puedo seguir siendo titular. Yo me lo curraré y ya veremos; de momento tengo la confianza de mis entrenadores y de mis compañeras que es lo más importante para sentirte bien allí atrás.

- Y visto lo visto, ¿qué meta te planteas como futbolista?

Visto lo visto... mi meta es poder seguir jugando y sobre todo disfrutando de los buenos ratos que me da el fútbol durante muchos años. Mi meta es poder seguir jugando y a la vez estudiando mi carrera (veterinaria). Ya juego en uno de los mejores equipos de España y lo demás -selección, me refiero- sólo depende de mi trabajo, de mis ganas de superarme, de la ilusión y sobre todo de que mi entrenador me siga poniendo en la portería y que mis jugadoras sigan confiando en mí.

- Ahora en verano, aunque vivimos en una liga humilde se mueven muchas ofertas. Seguro que algo hay... ¿Cuántas tienes ya?

Algo hay, algo hay... pero no mucho, (ríe)... ¡qué va! Yo estoy muy bien en el Espanyol.

- Hablando ya un poco de ti, ¿cómo es un día normal en tu vida?

Hay gente que dice que es estresante pero yo no lo veo tanto. A ver, te hablaré de un día de entreno, aunque será una suposición porque cada día de mi vida es diferente. Me levanto para ir a la Facultad, que entro a las 9, normalmente me quedo a comer en la 'uni' y por la tarde suelo tener prácticas... pero entre medio siempre hay tiempo para algún que otro café y un rato en ordenadores y tal... Y luego nada, me voy para la Cuidad Deportiva, me gusta llegar pronto, entrenamiento y para casa a dormir, a no ser que haya un plan mejor (ríe). Y esa es la base que cada día va cambiando dependiendo de mis ganas, de si alguien necesita algo, de si tengo que ir ha hacer prácticas a alguna granja por ahí...

- Es sabido los problemas que hay para empezar en el fútbol femenino cuando se es pequeñita, ¿cuándo empezaste a jugar?

Yo he jugado a balonmano, a baloncesto, he hecho atletismo... En aquella época el equipo de baloncesto del 'cole' acababa y yo no quería dejar el deporte; me dijeron que se estaba haciendo un equipo femenino de fútbol y allí fui a ver qué pasaba.

- Pocas chicas quieren ser porteras. Lucía Muñoz, Casamayor, y alguna portera más, empezaron siendo jugadoras para luego pasar a la portería. ¿Cómo empezaste tú en la portería?

Yo llegué sin pensar que sería portera, pero en el Igualada faltaba portera y me dieron los guantes y me dijeron, "¿te importa ponerte?" y yo pensé que lo que quería era jugar, me daba igual dónde (a mi padre no le hizo ninguna gracia). Y no sé, parece ser que no lo hacía mal del todo, así que allí me quedé (a mi padre ahora ya sí que le hace gracia).

- ¿Conoces futfem.com?

La verdad es que lo conozco, pero poco, todo hay que decirlo. Pero lo suelo mirar para leer algunas noticias y enterarme un poco, aunque yo con esto de los ordenadores y el Internet, poco...

- ¿Qué te parece?

Todo lo que sea bueno para el fútbol femenino me parece perfecto. Y la página además está muy bien, siempre muy al día y el diseño también me gusta, sí, sí. Todavía tengo que meterme en todos los recodos e investigar, pero lo que he visto hasta ahora ¡me gusta! - Y para terminar, un deseo de futuro para ti. Un deseo de futuro... pufff ¡sobre todo salud! Y que los que me acompañan en mi viaje por esta vida estén bien.

Gracias Cris, desde futfem.com te deseamos lo mejor. Muchas gracias a vosotros.

Creo que es una de las primeras entrevistas que me hacen. Ya ha pasado toda la temporada y todavía no me siento "jugadora de la máxima categoría", así que estas cosas todavía me emocionan y me hacen poner colorada...